"Pero entonces bailaban por las calles como peonzas enloquecidas, y yo vacilaba tras ellos como he estado haciendo toda mi vida mientras sigo a la gente que me interesa, porque la única gente que me interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde, arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas y entonces se ve estallar una luz azul y todo el mundo suelta un «¡Ahhh!»", Jack Kerouac


miércoles, 25 de julio de 2012

Salamanca

Pues nos ha caído una tormenta curiosa aquí en Santa Marta de Tormes, y comienza de nuevo justo ahora mientras escribo. Típica tormenta castellana, que hasta he salido sin camiseta debajo de la lluvia por el calor que hace.

Y hoy día por Salamanca, cansadillo de tanto caminar, con algunas fotos, nothing too fancy, pero con alguna sorpresa en ellas. En cualquier caso, voy a poner dos de ellas que son las menos malas.


Y ya queda menos para regresar. El viernes a las 14 cojo un autobús destino Oviedo, que llegará cinco horas después allí. Me apuesto cualquier cosa a que cruzando el Negrón me recibirá niebla, nubes y lluvia, como es habitual.

Y nada, ya no llueve, los pajarillos cantan y el sol está a punto de salir. Y yo creo que me voy a preparar otro café y a sentarme a descansar bien bien, que tengo las piernas algo molidas.

Y hasta aquí la información del frente. Por cierto, que ricas están las patatas revolconas, me encantan. Entre eso y el mosto me paso aquí media tarde de bar en bar.




Jesus Burgos Lobo
Quod natura non dat,
Salmantica non praestat

No hay comentarios:

Publicar un comentario