He dado con la pieza del rompecabezas que no encontraba: he perdido mi autoconfianza.
Ahora lo entiendo.
Sin autoconfianza no se puede construir nada, porque es necesario saber que los materiales y los planos son los adecuados: si no confiamos en esto, caerá.
El problema no es exterior, donde lo buscaba, quizás agravado por factores puntuales, sino que está mucho más cerca. Uno necesita primero creer en si mismo para poder llevar a cabo sus tareas. Por eso me lamentaba de que no podía escribir, de que no podría sacar el carnet de conducir, y etcétera. No tengo ninguna confianza en lo que pueda hacer aunque la gente a mi alrededor intente decirme que hago bien las cosas. No creo en mí mismo.
Necesito un serio balance entre mi antigua arrogancia y mi actual nivel de confianza cero, algo mixto y potente, lo que no puedo permitirme es desechar cosas que quiero porque creo que no voy a estar a la altura.
También necesito hacer un serio ajuste sobre lo que considero vergonzoso y lo que no, no puede ser que alguien que habla de fracasar como algo positivo le de vergüenza equivocarse. Es totalmente incompatible.
Realmente necesito reencontrarme, y atar a la bestia también, no puedo bajar la guardia como he hecho durante este tiempo.
Si no me creo una crisis semanal parece que no soy feliz... en fin.
Jesus Burgos Lobo
Semper Fidelis
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